Viruela símica: el 30% de los contagios en Argentina son pacientes portadores de VIH

Hasta el 31 de agosto se confirmaron 170 casos de viruela símica en el país, del total de casos confirmados, 41 presentaron antecedentes de viaje fuera del país, así lo indicó el último Boletín Epidemiológico Nacional emitido por el Ministerio de Salud de la Nación. El 40% de los contagios se notificaron en agosto, desde la semana epidemiológica 31 a 34. A la fecha no se notificaron casos graves ni fallecidos por el virus.

Los especialistas advierten que el número de casos de viruela símica podría ser mayor y no descartan más contagios. “Estamos convencidos de que vemos la punta del iceberg. Hay mucha gente que sabe, porque leyó y sabe o tiene un amigo, que tiene la enfermedad y en el mejor de los escenarios se aísla en su casa y no lo dice”, confirmó a AIRE Elena Obieta, médica infectóloga, integrante de la Sociedad Argentina de Infectología y jefa de servicio de Enfermedades Transmisibles en el Municipio de San Isidro.

 “Sabemos que el 30% de los pacientes tiene VIH y están en tratamiento, hay otros que están en profilaxis pre-exposición”, afirmó la especialista, que recomendó llevar una vida sexual consciente y segura.

El 40% de los contagios se informaron en las últimas cuatro semanas de agosto, al respecto Obieta no descartó que esta tendencia se sostenga. “Estas enfermedades evolucionan por brote. No sabemos cómo va a seguir, si los casos seguirán en incremento en las próximas semanas y luego bajarán”, sostuvo la infectóloga. El Boletín Epidemiológico Nacional indicó que 118 contagios se registraron en Caba, 40 en Buenos Aires, 3 en Santa Fe y 2 en Río Negro.

“Lo más preocupante es que no tomemos conciencia que estamos en un nivel de alerta de infecciones sexualmente transmisibles, de que todas las personas deben conocer su estatus ante el VIH, una enfermedad absolutamente tratable, todavía no curable y poder mantener el sexo lo más libre y placentero, pero con cuidado”, reiteró la infectóloga.

Hasta el momento la población más afectada es la compuesta por hombres que tienen sexo con otros hombres (90 de los 170 casos registrados hasta ahora lo refieren y para el resto de los casos no se cuenta con el dato). Con respecto a la jurisdicción de residencia de los casos confirmados, el 69,4% reside en CABA y 23,5% en la provincia de Buenos Aires, y el 2,9% en Córdoba.

La viruela símica puede afectar a cualquier persona que entre en contacto con una persona enferma de viruela símica, principalmente si tiene contacto físico directo -como el contacto sexual- o con materiales contaminados.

Desde el comienzo del brote, en la Argentina la mayoría de los casos presentaron síntomas leves de la enfermedad y a la fecha no se registraron muertos por el virus. Al respecto, la infectóloga recalcó que las dificultades que presenta la enfermedad son muy pocas, mientras que la mortalidad es menor al 1%.

“Las indicaciones de internación de pacientes son muy pocas y básicamente tienen que ver con el dolor porque si las úlceras son muy importantes en la región genital y perianal pueden generar mucho dolor y hay que darle analgésicos fuertes como morfina”, explicó Orbeta.

Los casos se caracterizan principalmente por la presencia de exantemas vesiculares, en varios casos pocas lesiones en diferentes localizaciones incluyendo genitales, perianales, manos, torso y cara.

Contexto mundial

Desde el 1 de enero hasta el 24 de agosto de 2022, se han registrado más de 42.000 casos de viruela símica confirmados por laboratorio en 124 países y 12 muertes distribuidas en cuatro de las seis Regiones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En el mundo se notificaron 5.100 casos hasta el 31 de agostos. En la Región de las Américas se confirmaron 18.659 casos en una semana (desde el 11 al 17 de agosto) y se confirmaron dos muertes, la primera reportada por Brasil y la segunda por Ecuador. Ambas personas eran de sexo masculino y poseían patologías preexistentes. Los casos confirmados con información (3.916/4.035) son hombres entre las edades de 25 a 45 años, y la mayoría (88%) son hombres que mantuvieron relaciones sexuales con otros hombres.

 La proporción de casos de sexo femenino está en aumento en las últimas tres semanas. Cinco países en la Región reportaron 46 casos confirmados con personas menores a 18 años (Brasil, Canadá, Ecuador, México y Perú). El 82% casos en la Región de las Américas, con información disponible, son casos de transmisión local.

 El día 23 de julio de 2022 la OMS y debido a la rápida propagación del virus en al menos 75 países y territorios, declaró que el brote actual de viruela constituye una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional, según el Reglamento Sanitario Internacional (RSI-2005), motivo por el cual se insta a intensificar las medidas de vigilancia epidemiológica, identificar casos, y sus contactos e implementar las medidas de control.

Las ampollas o lesiones que surgen en la piel son las vías más amplias de contagio. En el interior de estas ampollas está el líquido que contiene el virus de la viruela símica, las personas se contagian si entran en contacto con el líquido, a diferencia del covid que el contagio es a través de gotas de saliva.

En la viruela del mono el contagio se da a través del contacto piel con piel o una ampolla que se rompe, se deposita el líquido en una superficie y esto se esparce. Por eso el contagio es mucho menos intenso que el covid.
 
En el interior de estas ampollas está el líquido que contiene el virus de la viruela símica, las personas se contagian si entran en contacto con el líquido, a diferencia del covid que el contagio es a través de gotas de saliva.

Lo que llama la atención para sospechar de la enfermedad es la aparición de lesiones en la piel, las vesículas y ampollas llenas de líquido. La viruela símica empieza como una gripe, se inflaman los ganglios, un aspecto que la diferencia de otras viruelas, luego aparecen las lesiones en piel donde la enfermedad está en un estadio avanzado.

En la viruela el período de incubación es mayor que el de los síntomas, durante esta etapa la persona infectada no contagia y la enfermedad desaparece en 15 días.