La progresión por cuarto fue: 25-22/ 47-35/ 58-56/ 73-81. Santiago Andrione con 17 fue el goleador rojiblanco mientras que por el lado del visitante Miguel convirtió 23 y Giaveno 17. Gran marco de público en el Gigante de la Avenida.

Un primer cuarto equilibrado pero ya con señales de estar mejor parado en el rectángulo de juego de parte de los locales. Unión empezó a abusar del tiro de tres puntos y su defensa flaqueó una y otra vez ante las embestidas de Sportivo. Santiago Andrione fue la figura excluyente del segundo cuarto, escenario donde Sportivo sacó 15 unidades y finalizó la primera mitad con una ventaja que sostuvo con solvencia en los minutos previos.

El tercer cuarto sería fundamental para la historia de los sanguillerminos porque lo ganaría Unión 21-11 y con esto decididamente empezó a competir mano a mano con su eterno rival y sin diferencias en el score. De la mano de una gran defensa, empezaron a aparecer por decantación las grandes figuras: la conducción de Juan José Giaveno, el goleo de Miguel y la presencia en el juego interior de Bruno Mengoni. Sportivo, en tanto, se trabó en ataque y utilizó infructuosamente el uno contra uno que no lo llevó a demasiados buenos terrenos en la contienda.

En el cuarto final y con Unión en partido, la tensión y el dramatismo de todo clásico estuvieron sobre la mesa. Un mejor cierre de partido del equipo de Marcelo Mengoni (más compacto, más claro y sacando a relucir un gran temple) lo puso al frente en la serie. En el suardense, por su parte, su libreto pudo ser ejecutado de a cuenta gotas, con momentos de mas pelea que juego y sin obtener respuestas convincentes.

Final caliente con mucho inconformismo de los locales para con los árbitros Marquello-Guazzarotti y Garza quienes «se lo hicieron saber» una vez terminado el duelo y con un par de cruces entre jugadores de Sportivo y simpatizantes de Unión quienes celebraban el momento.

Fuente www.zonade3.com