El merecido homenaje al goleador Emiliano Sala

Más allá de su enorme capacidad como profesional y como goleador, la historia de Emiliano se hizo conocida, lamentablemente, por la tragedia.
La historia la conocen todos, el joven jugador viajaba en el avión privado Piper PA-46 Malibu desde Nantes (Francia) rumbo a Cardiff (Gales) pero nunca llegó. En la noche del lunes 21 de enero del 2019, cuando el avión volaba sobre el Canal de la Mancha desapareció. A partir de allí comenzaron una búsqueda que luego se canceló y fue retomada por decisión de los familiares de Emiliano.
Ante la esperanza y la fe de poder encontrarlos con vida a él y al piloto David Ibbotson, trece días después, finalmente, encontraron la aeronave en las profundidades del Canal de la Mancha, el cuerpo de Emiliano fue rescatado el miércoles 6 de febrero y al día siguiente llegó la confirmación oficial.
La peor noticia llegó y conmocionó al mundo entero, aunque todavía quedan muchas dudas respecto al accidente, a la desaparición del piloto y a todo lo sucedido en la tragedia del futbolista argentino.
La despedida a Emiliano se realizó en la localidad de Progreso de la provincia de Santa Fe, específicamente en el Club San Martín, lugar donde él empezó a patear la pelota. Familiares, amigos, compañeros, admiradores y vecinos se acercaron para darle el último adiós.
Con tan sólo 28 años cumplió muchísimos objetivos en su carrera profesional y trabajó incansablemente para lograrlo. Emi, como le decían sus allegados, nació en Cululú, vivió toda su infancia en Progreso, pero dejó Santa Fe para irse al proyecto Crecer en San Francisco, provincia de Córdoba. A partir de ahí, su carrera, sus virtudes y sus habilidades con la pelota no tenían techo, jugó en equipos de Francia y acababa de fichar con el Cardiff City de la Premier League inglesa tras dejar Nantes, un club que lo amó y lo homenajeó en el último partido y hasta decidió quitar la camiseta número “9” que lo identificó como un reconocimiento.
La despedida del joven en Progreso fue muy emotiva, la localidad estaba conmovida y triste por el fallecimiento de Emiliano que tenía toda una vida por delante.
Quien fue su entrenador en las inferiores del Club San Martín, Diego Solís, fue entrevistado por El Departamental para recordarlo, a pesar de las lágrimas, con una sonrisa y con orgullo como él se merece.
“Nos conocemos como todo pueblo, de chicos, de la vida, de cruzarnos, de andar de un lado para el otro, de ir al club. Yo a él lo tuve de los 13 a los 15 años en las inferiores y después se fue a San Francisco. Teníamos una relación normal, de preguntarle cosas, saludarlo por su cumpleaños y la última vez que hablamos le hice una broma por el nuevo pase. Cuando venía a Progreso nos juntábamos un rato, nos saludábamos. Emiliano era sencillo, humilde, reservado, un chico agradable, bueno y excelente persona”, contó Diego.
Tal como manifestó su ex Director Técnico, el pueblo estaba apagado, estaba todo cerrado y no se hablaba de otro tema. Su partida marcó a muchísimas personas y nadie olvidará al goleador.
“El día del accidente no podíamos creer lo que había pasado, me avisó mi mamá temprano y yo no caía, estaba shockeado, pensaba que no era cierto, que no era él. Todo el pueblo tenía esperanzas. Me acuerdo que el 31 de octubre nosotros le mandamos un video con mis hijas saludándolo por su cumpleaños y él nos agradeció, después, el jueves de la semana de la tragedia charlamos y bromeamos por el pase”.
Por último, Solís destacó las virtudes de Emiliano, quien tuvo el lindo gesto de obsequiarles dos camisetas a sus hijas con el número 9 cuando eran pequeñas.
“Fui al velatorio, había mucha gente, estaba todo tan apagado que no parecía Progreso y estaba lleno de medios nacionales e internacionales. Lo vamos a recordar, Emiliano siempre fue delantero a base de su sacrificio y sus ganas, era un goleador muy querido, empeñado en su trabajo y cien por ciento deportista”.